Monday, August 9, 2010

La Piramide de la Impunidad en la Republica Dominicana.

Cuando crecia en mi barrio natal, Villa Consuelo, en el otrora Santo Domingo de Guzman, que todavia no habia sido descuartizado en varios "municipios", veiamos como al ser detenidos los ciudadanos, en su mayoria, jovenes, sin que esto signifique que eran exclusivamente jovenes, pero la inmensa mayoria de los detenidos lo eran; la "autoridad" policial, representada por una patrulla de dos miembros, requerian la cedula de identidad, los sellos que se debian pagar anualmente y mas adelante se pedia tambien el carnet electoral, documentos que fueron fusionados con el tiempo por la Junta Central Electoral. El no poder mostrar estos documentos o los sellos de la cedula constituia un delito que se podia pagar yendo detenido o arreglandose con los miembros de la patrulla, a veces con el famoso "deme un chance" o simplemente pasando un par de "duartes" o papeletas de a peso, ya desaparecidas. Se hacia justicia en el "lugar de los hechos" y el ciudadano infractor seguia su camino impunemente.

Estas practicas se generalizaron a tal punto que el mas vetusto de nuestros pasados presidentes de la republica justifico el no hacerle aumento al salario de los policias en el entendido de que sus ingresos estaban mas que garantizados por lo que en Mexico se conoce como la "mordida" y "macuteo" en Republica Dominicana o bien el soborno para salir de alguna situacion reñida con la ley pero de poca relevancia procesal penal o criminal, peleas, no portar la cedula, hacer escandalo, infracciones a la ley de transito de vehiculos de motor u otra nimiedad similar a las citadas.

Si la patrulla policial no entraba en negociaciones con el o los detenidos por diversas razones, entre las cuales debo citar la honestidad de los componentes o al menos uno de los componentes de la patrulla, entonces se procedia a llevar a uno de los destacamentos policiales de la ciudad, generalmente al que pertenecian los agentes actuantes o al mas cercano, cosas que no tenian necesariamente que coincidir, una vez alli, la custodia pasaba a estar a cargo del oficial encargado, termino que no establece necesariamente el rango de oficial, es mas destinado al cargo, explico esto porque no pocas veces el "oficial encargado" era un sargento y hasta un cabo.

Aqui el flamante oficial encargado podia hacer de las de el, no digo o de ella porque para la epoca que relato los eventos, aun las mujeres no habian sido incorporadas a las filas de la "institucion del orden" como suele llamarsele a la policia nacional, al menos en funciones de patrullaje e investigacion. El esquema se repetia, o el oficial determinaba si valia la pena abrir un expediente, si hacia que uno de sus subalternos sirviera de intermediario para que la familia del detenido dejara caer unos pesos, cantidad que era muy superior a la que se exigia o aceptaba la patrulla callejera. Aqui debo detenerme para recalcar los terminos "exigia" o "aceptaba" porque asi mismo era como sucedian los acontecimientos, algunas veces se exigia el dinero, otras mas bien se aceptaba sin que la presion de parte del oficial se hiciera sentir.

Cuando las cosas pasaban a la accion de la justicia, aqui habian dos procesos, el del fiscal, quien podia desestimar la querella o darle curso, muchos sabemos que la desestimacion de la querella en no pocas ocasiones estuvo motivada por el patricio duarte cuyo retrato aparecia en las papeletas de un peso oro de circulacion nacional como emblema momentario del pais. Pero no siempre esto sucedia y en casos muy graves o en los que los actores de la queja no podian ser burlados facilmente, iban a juicio.

Ir a juicio elevaba el conflicto o la infraccion, delito o crimen a un nivel muy superior y complejo, pero aun no se descartaba nunca que el juez a cargo de tomar una decision se "vendiera" y decretara un "no ha lugar", insuficiencia de pruebas o por otro lado se interpusiera un "habeas corpus", todos medios para salir del impasse sin tener que pagarle a la sociedad la deuda contraida al violentar las leyes de la republica. No se me escapa que en algunos casos, al formular un expediente tambien se podia omitir infracciones que al no aparecer provocaban que cualquier pena a cumplir fuese sustancialmente menor que si el expediente contuviera tales detalles.

Es muy probable que si algun jurista lee estas lineas se provoque hasta la carcajada porque sospecho que al querer describir esta piramide de la impunidad en mi adorada republica dominicana, me haya quedado corto o solo haya arañado la superficie, bien si esta es una reaccion que traiga a su vez una exposicion mas detallada y pormenorizada de este fenomeno que ha llegado al colmo de que un ex-presidente, a modo de chistecito, decidio retirar una querella del estado dominicano contra otro ex-presidente por un caso vergonzoso de corrupcion, se necesitan mas ejemplos de impunidad, para cerrar este articulejo debo dejar a su consideracion los casos en que implicados en desfalcos bancarios hayan sido "indultados" sin que siquiera una infima parte de la condena impuesta fuese servida tras las rejas.

A pesar de lo que escribo aqui, sigo bendiciendo mi pais, mi pueblo, mi patria. Se lo merece por haber sufrido estos lastres y seguir incolume hacia el futuro. Hasta una nueva entrega de mis opiniones, que no deben ser las unicas, espero conocer las suyas tambien.

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